Me preguntó si estaría dispuesto a colaborar en construir el primer skatepark en África Oriental / Nairobi / Kenia para un proyecto llamado Shangilia, con la condición de que tenía que tomar rápidamente la decisión. Después de un rato, lo llamé y le dije que sí, sin saber en qué me estaba metiendo.

Sin embargo, al llegar y conocer a los locales, me fascinó la pequeña pero fuerte escena de skate en Nairobi. Empecé a entrevistar a algunos lugareños y hacer algunas tomas con mi cámara de 8 mm.

Durante los 3 meses de trabajo en la construcción del skatepark, quedé continuamente impresionado por el trabajo realizado por los locales, los niños y los maestros del proyecto Shangilia, su poder imparable y su apasionada creencia en el skateboarding.

Sammy Karugu fue uno de los locales que entrevisté y desarrollamos una buena amistad. En una conversación, me dijo que había filmado a sus amigos patinando por la ciudad con una pequeña cámara. Este corto documental está compuesto por las imágenes que me mostró, mi propia película de 8 mm y las entrevistas.